Ya decía Lorenzo Díaz en el prólogo del tomo ‘Samurai’ de Usagi Yojimbo que la historia del vagabundo sin pasado ni procedencia concreta que ayuda a aquellos en problemas con los que se encuentra es un mito universal presente en toda cultura, además de ser una de las mejores formas de describir las historias del ronin creado por Stan Sakai. Pero claro está, no todo puede ser tan sencillo, sobre todo si tenemos en cuenta que Sakai tenía pensado un pasado muy claro para su personaje y que parece tener, al menos a grandes rasgos, perfilada gran parte de su futuro. Pero vayamos por partes...
Stan Sakai, el creador del samurai de orejas largas, es algo más que un hombrecillo simpático y agradable aficionado a beber Bitter Kas las pocas veces que se viene a nuestro país. Este norteamericano de raíces japonesas (nacido en Kyoto en 1953, pero criado en Hawai) es un genio del noveno arte con todas las de la ley (y tiene una buena lista de premios y años de experiencia para demostrarlo). En su juventud tendría sus primeros contactos con el mundo del comic, como muchos otros, gracias a Marvel y DC, pasando años más tarde a estudiar dibujo y pintura en la Universidad de Hawai y en el Art Center Collage of Desing de Los Ángeles, siendo su primer trabajo en el mundillo el rotular el cómic de su amigo Sergio Aragonés, Groo el Errante. Según el propio Sakai “nunca había rotulado ningún cómic y la verdad es que no sabía muy bien como hacerlo. Suerte que una revista llamada ‘Comics Scene’ publicó por aquel entonces un artículo en el que se explicaba paso a paso como se debía hacer” (Stan Sakai, entrevista, Trama n.13). Eso sería el comienzo de una carrera como rotulista, en la que destacarían aparte de Groo, cosas como las tiras de prensa de Spider-Man de Stan Lee y toda clase de diversos trabajos en fanzines con los que comenzó a labrarse un nombre hasta que envió una historieta a Steve Gallaci, que pretendía editar una revista de cómics de diversa temática. La revista era Albedo, y esa historieta sería su primer trabajo profesional como autor completo, Nilson Groundthumper, obra de la que los lectores españoles por desgracia no conocemos nada de nada, concebida como una fantasía medieval ambientada en Europa, de tono generalmente humorístico y en la que Usagi sería un personaje secundario.
El conejo samurai nace como personaje propiamente dicho en 1984, cuando Sakai comienza a publicar las primeras historias cortas del personaje. Su primera editorial sería Fantagraphics, para luego saltar a Mirage, la editorial de ciertos quelonios mutantes ninja con cuyos creadores Sakai también tenía buena relación para finalmente acabar el personaje siendo publicado por Dark Horse (la editorial independiente menos independiente de las independientes), donde sigue hasta ahora en una serie regular mes a mes y con buen pulso. Cualquiera que se aproxime a los cómics de Usagi Yojimbo por primera vez puede llevarse la impresión errónea de que se encuentra ante un tebeo infantil por el uso de funny animals como personajes, pero el uso de animales humanizados es poco menos que un recurso estilístico para dotar de más personalidad si cabe a los personajes y a ese Japón feudal perfectamente retratado por el autor, pues la lectura atenta revela historias con alto contenido en el desarrollo de sus protagonistas y de los hechos, tocándose toda clase de temas desde una perspectiva madura (e incluso bastante dura y amarga en algunas historias) al tiempo que mantiene un tono que no imposibilita la lectura por parte de lectores jóvenes. Ciertamente es una obra ‘para todos los públicos’ con todo lo que ese termino implica o debería implicar. De esta forma las historias son unas mejores que otras (es imposible mantener un nivel continuo), pero incluso las más ‘flojas’ (me cuesta usar este termino con ellas) están por encima de la media habitual de lo que uno puede encontrarse, y es que Sakai es de esos autores de los que incluso de sus ‘peores’ trabajos puede aprenderse algo, lo cual dice mucho de su gran capacidad como autor y narrador.
Las historias de Usagi Yojimbo nos cuentan el vagabundear de este conejo ronin, un samurai sin señor al que servir tras la muerte de este en la batalla de Adachigahara y que recorre el país sin destino concreto. Muchos en situación similar a la suya se han dedicado al pillaje o a trabajar como cazarrecompensas, pero Usagi opta por seguir el musha shugyo (peregrinaje del guerrero) para mejorar sus cualidades y templar su espíritu, dedicándose a ayudar a quien se encuentre en problemas, trabajar ocasionalmente como guardaespaldas (yojimbo) y de paso meterse en muchos líos, por muy diversos motivos, ganándose un buen puñado de aliados pero también unos cuantos enemigos en su continuo viaje. Usagi es un seguidor firme del bushido, el código de conducta de todo buen samurai, pero pese a eso mantiene su propia idiosincrasia y es firme en sus convicciones personales. Ciertamente la palabra noble es de las que mejor lo describe, y también inteligente, de buen carácter y sensato... aunque esto último podría ser discutido por su viejo sensei ya que de cuando en cuando Usagi sigue siendo más impulsivo de lo que debiera, además de mostrar en ocasiones cierto aspecto pícaro en su carácter (es bueno timando a los timadores si se lo propone). A lo largo del cómic el personaje madura y no solo cambia su apariencia (más por la mejora progresiva de Sakai como dibujante) sino que también crece como persona, ganando sabiduría y conocimiento con el tiempo, aprendiendo de sus errores y de las lecciones que se encuentra en su viaje. Como último detalle, pero no por ello menos importante, está el hecho de que Sakai se inspiró claramente en un personaje histórico al concebir a su creación, Miyamoto Musashi, tomando de él no solo su nombre (Miyamoto Usagi) si no también ciertos aspectos de su forma de vida.
Como decíamos antes, Usagi se ha ganado un buen número de amigos y enemigos con el paso del tiempo que engloban una de las listas de personajes secundarios (algunos más recurrentes que otros) más ricas con las que puede contar una serie. Procedo a mencionar algunos de los más relevantes, porque me resultaría imposible dedicar espacio a todos, así que no están todos los que son pero si son todos los que están. Comenzamos con el que podríamos decir que es el mejor amigo de Usagi... bueno, más o menos: Murakami ‘Gen’ Gennosuke, inspirado en el personaje interpretado por Toshiro Mifune en el film “Yojimbo”. Gen es un rinoceronte cazarrecompensas, vago, aprovechado, estafador y siempre pensando en su propio beneficio y responsable de arrastrar a Usagi a más de un problema. Pese a eso Gen es mejor persona de lo que él mismo querría admitir (aunque tampoco es un santo, ni de lejos), con un pasado más interesante del que podría imaginarse a simple vista y ciertamente un buen amigo del orejas largas pese a todas las diferencias existentes entre los dos.
A continuación nos encontramos con Tomoe Ame, samurai del clan Geishu y guarda personal del señor Noriyuki. Tomoe está inspirada en Tomoe Gozen, una de las pocas verdaderas mujeres samuráis de su época, aunque curiosamente su nombre ‘Tomoe Ame’ tiene su origen en una golosina a la que Sakai era aficionado en su niñez. Tomoe es de lejos el personaje secundario favorito de los lectores habituales de la serie y también del mismo Sakai, que siente por ella un cariño especial. Una samurai en toda regla, leal a su joven señor, excelente con la espada y también de gran entereza moral, Tomoe es la mejor amiga de Usagi, con el cual ha luchado codo con codo más de una vez.
Siguiendo en importancia a esos dos personajes nos encontraríamos con gente como Chizu, la líder del clan ninja Neko, que puede ser tanto amiga como enemiga según cuales sean las circunstancias y que parece sentir cierta atracción por el ronin protagonista; el espadachín y forajido Zato-Ino, un cerdo ciego claramente basado en el personaje Zatoichi que es uno de los más interesantes de toda la serie, llevado a tener una enemistad con Usagi más propia de las circunstancias dado que el ronin, sabiendo de su sufrimiento, nunca ha buscado enfrentarse a él (en verdad, Usagi ve a Ino casi como un amigo y querría ayudarlo aunque lo primero que tenga el cerdo en mente sea hacer guiso de conejo con él); la artista ambulante Kitsune, ladrona a tiempo parcial (“una chica debe hacer lo que puede para salir adelante”); el monje Sanshobo, antiguo samurai que dejaría el camino de la espada tras unos trágicos hechos y que pese a vivir en la paz de su monasterio no ha olvidado del todo sus antiguas aptitudes militares; el samurai cazador de demonios Sasuke, inspirado en el personaje histórico/mítico de Sarutobi Sasuke, del que poco sabemos salvo que presenta un carácter ciertamente manipulador y posee habilidades sobrenaturales; el Inspector Ishida, uno de esos personajes con entidad suficiente que bien podrían ser ellos los protagonistas (y en las historias donde aparece ese es casi el caso, viéndose Usagi inclinado a ser el ‘Watson’ de tan particular ‘Holmes’ para el que “la justicia es para todos o no es justicia”); Katsuichi, el sensei de Usagi, de particulares métodos de enseñanza pero claramente efectivos (además, genial lo de llamar ‘gorgojo de la patata’ a su alumno); etc...
Y como villanos propiamente dichos debemos destacar a Lord Hikiji, prácticamente responsable de la condición de ronin de Usagi, y personaje al que hasta ahora solo hemos visto la cara una vez (y menuda sorpresa, por cierto), siempre manteniéndose en las sombras sirviéndose de todos los medios posibles para conseguir sus propósitos, usando no solo samuráis sino también a ninjas como el clan Neko para ello, y deseando hacerse con el poder político absoluto siendo Shogun. Aunque prácticamente nunca lo veamos, su sombra planea en muchas de las historias y sucesos en los que Usagi se verá envuelto, siendo Hikiji el gran manipulador en las sombras, prácticamente intocable.
Pero no es Hikiji el personaje al que deberíamos considerar la némesis de Usagi. Ese puesto a mi parecer es única y exclusivamente para ÉL:
Jei. De ojos vacíos, voz salida de la tumba, sonrisa demoníaca... poco o nada se sabe sobre este lobo experto en el uso de la lanza que vaga por los caminos pretendiendo limpiar el mundo de maldad y pecadores. Eso no tendría que ser malo si no fuese porque a sus ojos prácticamente nadie es inocente, todos tienen maldad en su corazón por poca que sea... la única persona a la que ha visto como inocente y que le acompaña a todas partes es Keiko, una joven huérfana que sigue a su “tío” allá donde este vaya. Existen muchas teorías sobre quién o qué es Jei realmente... afirma ser un Elegido de los Dioses (uno de sus sobrenombres es el de ‘Espada de los Dioses’), elegido por ellos tras pasar una fiebres (y son sus propias palabras) para limpiar de mal el mundo. Otros opinan que es solo un loco, aunque ciertamente resulta difícil concretar si es o no ‘humano’, sobre todo dada su costumbre de sobrevivir a todo lo que le echen, volviendo de la muerte una y otra vez. Como detalle curioso en relación a esto está el hecho de que su nombre Jei-san en inglés se pronuncia de forma similar a ‘Jason’, lo cual podría ser una referencia al Jason Voorhees de Viernes 13, otro especialista en no pringarla nunca, lo que sería una muestra de lo friki que es Sakai como autor para ciertas cosas. Muchos más detalles sobre Jei y su naturaleza me permitiréis no contarlos dado que sería reventaros gran parte del interés que supone encontrarse a este personaje en las historias donde cuenta con un papel de relativa importancia.
Y así llegamos al final de este post... podría extenderme más, comentando algunas historias en concreto de Usagi pero creo que eso quizá quede para otra ocasión (¿Quizá un post con las 10 mejores aventuras del conejo? Os dejo someterlo a voto) o hablando del spin-off de Usagi Yojimbo que sería Space Usagi (las andanzas en un futuro distante de un descendiente del samurai) o curiosidades como la historia protagonizada por Terry Miyamoto, una descendiente contemporánea del ronin. Como punto y final, para aquellos interesados en el personaje y que estéis pensando en lanzaros a leer algo sobre él os dejo la lista de los tomos publicados en España por Planeta DeAgostini hasta la fecha, en el orden cronológico de lectura (porque el de publicación fue más bien caótico), aunque técnicamente no supone a grandes rasgos ningún problema empezar por cualquiera de ellos para disfrutar de las historias concebidas por Sakai:
- Primeras Andanzas.
- Samurai.
- El Camino del Vagabundo.
- La Conspiración del Dragón.
- Cabra Solitaria y su Hijo.
- Círculos.
- La Historia de Gen.
- Sombras de Muerte.
- Daisho.
- Al Filo de la Vida y la Muerte.
- Estaciones.
- Segadora (¡OBRA MAESTRA!)
- Sombras Grises.
- La Máscara del Demonio.
- Segadora II: Viaje al Templo de Atsuta.
Abayo!
"Manitos, debemos acabar con los luchadores de la libertad antes de que llegue la estación de lluvias ¡Regalaré un flamante burro a quien me traiga la cabeza del general Montoya!"
